Adolescentes de la residencia de Cauquenes aprenden a cuidar la tierra y las bondades de la agricultura responsable

  • Un proyecto que forma parte de los talleres pre laborales, ideado por la directora de la residencia de Cauquenes, Olga Orellana, y su equipo de profesionales para promover el consumo sostenible de frutas y hortalizas.

La Residencia de Cauquenes cuenta con grandes extensiones de terreno que ofrecen a los niños y adolescentes espacios para recrearse, hacer deporte, aprender y desarrollarse en diversas áreas, una de éstas es la agricultura, un proyecto que nació de su directora, Olga Orellana, y equipo de profesionales con el objetivo de acercar a los más niños y jóvenes al origen de los productos agrícolas.

Aprovechando los amplios espacios del lugar se construyó un invernadero y diversos sectores para el cultivo de lechugas, tomates, pepinos, aceitunas, arándanos, sandías, manzanas y frutillas, entre muchos otros, los que son sembrados y cosechados por los adolescentes, esto significa que deben preocuparse de todo el proceso, lo cual requiere responsabilidad, constancia y compromiso por parte de ellos.

Esta actividad, que además de enseñar un oficio entrega importantes valores, ha sido un éxito entre los jóvenes, quienes gracias a su entusiasmo y esfuerzo han logrado la cosecha de hermosas frutas y verduras, respetando los tiempos y temporadas de éstas, porque la finalidad es entregarles las bases de una agricultura sostenible, que en un futuro puedan realizar de forma independiente.

Uno de los aspectos más relevantes, es que mediante este tipo de actividades los adolescentes son conscientes del esfuerzo que requiere la cosecha de una hortaliza o fruta, lo que enaltece el esfuerzo de ellos y el respeto hacia lo que consumen para su alimentación.

Los profesionales del lugar han sido una pieza importante en este proyecto, pues son quienes han entregado todas las enseñanzas sobre el proceso de cultivo, como la importancia del suelo, forma y momento de sembrar, poda, riego y cosecha.

“Este proyecto forma parte de los talleres pre laborales, donde los adolescentes aprenden a cuidar a un otro, a ser responsables y respetuosos del medio ambiente y de quienes nos rodean” afirma Olga Orellana, quien se siente orgullosa por los avances que se han logrado y por el compromiso que ha tenido el equipo de profesionales para sacar adelante esta iniciativa.